LOS GLOBOS DE ORO


Esto de los premios es un mundillo cada vez más surrealista. Criticados, aclamados, seguidos con pasión, seguidos con bostezos...
Los Globos de Oro siguen siendo una fiestaza de promoción de Moët et Chandon, donde los nominados e invitados se lo pasan pipa haciendo el paripé y empinando el codo, no tiene más.
Darle mayor trascendencia, dependiendo si está uno posicionado a un lado o a otro del la línea industrial que marca el trust hollywoodiense, carece de sentido. Olvidad el concepto "antesala de los Oscars" entendido como una predicción de triunfadores. Lo único que está claro aquí es que actores, directores y productores de peso siguen facilitando el tranquilo vuelo de esta velada con su presencia. Independientemente de la validez del criterio que muestren los componentes de la prensa extranjera. A los que otorgan su voto, se les critica el hecho de no ser profesionales de la industria, como si un actor, por el hecho de serlo, tuviera mayor capacidad intelectual u objetividad y para lo que nos ocupa, supiera más de cine, que un periodista extranjero corresponsal en USA. El argumento se derrumba con una leve brisa.
El argumento más esgrimido, sin embargo, es el de la corrupción. Compra de votos. Bien, señoras y señores, si está leyendo esto algún niño de 6 años, que pare ahora. Para el resto: Alguien alberga dudas de que esto ocurra en absolutamente todos los premios de los que depende una ulterior ganancia económica (o sessuarl)? Pues eso.
El resto, todo son preferencias personales y estados emocionales de quien vea la peli, por lo que nadie debería depender de si el votante de turno se acaba de divorciar y tiene una mala leche de órdago, o está empalagosamente tien.no porque acaba de ser papá o abuela.
Por tanto, si Tarantino cae mejor en unos bares que otros, Spielberg provoca filias y fobias sionistas o antisemitas, Jodie Foster tiene problemas graves de apego a la realidad, o Ben Affleck es realmente hábil en el mundo del cine o simplemente es un pijo de buena familia excepcionalmente relacionado, debería importarnos aproximadamente un carajo.
Respecto a las pelis, mi recomendación es que vayáis a verlas si hay algo que os atrae de ellas, o por simple curiosidad...o porque no tenéis nada mejor que hacer.
Respecto a la fiesta, lo mejor que me llevo es la confirmación de que Tina Fey y Amy Poehler, las anfitrionas, son dos tías divertidas y muy hábiles colando puñaladas. Por favor, recuperad cuando podáis 30 Rock, Parks and Recreation, y las últimas temporadas de Saturday Night Live.

Si a alguien le interesa el palmarés, en Screenrant. Si alguien quiere ver todo el festival, youtube no lo deja insertar, así que clicad aquí.

Hasta el año que viene.


Stay tuned!